Un cambio, evento, o anomalía en un sistema de monitoreo se refiere al instante en que se detecta una variación abrupta o significativa de alguno de sus parámetros con respecto a su patrón habitual de comportamiento.La detección de estos eventos son utilizadas en sistemas de alerta temprana meteorológicas, ambientales, en mantenimiento de maquinarias, y el monitoreo de servidores informáticos, entre otros.

La detección de cambios de estado en un sistema emplea un modelo predictivo y el análisis de los errores resultantes al comparar los valores predichos con los observados por la red de monitoreo. Variaciones significativas del error pueden ser atribuidas a cambios que disparen una alerta. El modelo puede ser estadístico, basado en el procesamiento digital de señales adaptativo y, en forma mas reciente en la inteligencia computacional.