Efectuado -históricamente- en modalidad presencial, las ediciones 2020/2021 se llevaron a cabo en modalidad virtual. Particularidades de la iniciativa y adaptaciones realizadas, en voz de sus protagonistas. 

“Se trata de un programa que propone el desarrollo de aptitudes laborales para jóvenes desempleados, a través de cursos dictados por la Universidad Tecnológica Nacional”. Así resume Mauro Etcheverry- director de Desarrollo Regional de la Secretaría de Cultura y Extensión Universitaria de la UTN FRBB- la finalidad de Buen Trabajo: una iniciativa surgida en el año 2007 y realizada ininterrumpidamente en el transcurso de sus 14 años de existencia. La génesis de la idea se gestó en el marco del Panel Comunitario: un espacio creado (en el 2004) por Dow Argentina- e integrado por prestigiosas empresas y organizaciones- que funciona como canal de comunicación estratégico entre la empresa y los vecinos de la comunidad de Ingeniero White. “Desde ese momento, hay reuniones mensuales fijas con un grupo estable de habitantes de la localidad. La gente expresa sus dudas e inquietudes; y la empresa-  forma parte (con sus representantes) de la mesa de trabajo- acompaña en el abordaje de las temáticas de interés común”, cuenta Pamela Luppo. La facilitadora del Panel Comunitario agrega a continuación: “A partir de allí se generan distintos espacios de construcción comunitaria para ejecutar acciones y programas para la comunidad”.  La preocupación por la incorporación de  jóvenes whitenses al mercado laboral- abordada en los encuentros-llevó a los integrantes del Panel a pensar en un programa de capacitación en oficios industriales como posible solución a la problemática. “La UTN es socio estratégico desde el principio. Por intermedio de su área de Extensión Universitaria realiza un censo con las empresas contratistas del Polo Petroquímico, con el objetivo de definir cuál es la demanda de oficios que va a haber el año entrante; y a partir de ahí, qué cursos se dictarán”, explica Luppo. Añade seguidamente: “También aportan las empresas que conforman la mesa; tanto en lo alusivo a la demanda interna que puedan llegar a tener como en cuestiones que tienen que ver con lo actitudinal (en la forma de presentarse a una entrevista de trabajo, por ejemplo)”.

Adaptarse a las circunstancias

El programa Buen Trabajo está destinado a capacitar en oficios industriales a personas desocupadas o subocupadas, comprendidas en una franja etaria entre los 18 y 35 años. Requiere que los alumnos tengan secundario completo y deseen mejorar sus condiciones de empleabilidad. Hasta el advenimiento de la pandemia, las capacitaciones se realizaban en las instalaciones del C4P (situado en el Parque Industrial). Actualmente, se efectúan mediante plataforma virtual y de manera completamente digital. “Desde el 2020 contamos con un nuevo formato en lo atinente a la modalidad (primer año en el que se realizaron cursos virtuales) y al contenido (mayor presencia de teoría)”, explica Tamara San Emeterio. Posteriormente, la licenciada en Psicología y docente añade: “El programa venía apuntando a una formación integral – cursos de seguridad, empleabilidad,

de formación de valores- y en la edición del pasado año se decidió apostar por las habilidades blandas. Las empresas demandan estas habilidades y tienen dificultades para encontrar perfiles de esa clase entre los jóvenes. Lo que convierte al contenido en una oferta formativa interesante, necesaria y urgente”. En alusión a la modalidad, la ex tutora del programa (2018-2020) aduce: “A mí me parece que la experiencia virtual resultó positiva”. Cita como ejemplos: el aprovechamiento de los recursos audiovisuales y la utilización de software de colaboración en línea (beneficioso en la realización de actividades grupales sobre el uso de herramientas de diseño en la confección de un CV) y nuevas plataformas que permitieron la interacción alumno-contenido (agregando un componente lúdico que posibilitó a los alumnos “engancharse” desde un costado divertido con el material de clases).  Ulteriormente, alega: “En términos generales, considero que la modalidad virtual nos ofrece una opción interesante para el dictado de cursos que presentan mayor carga teórica”. Concluye San Emeterio: “No solo permitió dar continuidad al programa Buen Trabajo, sino que hizo posible trabajar de manera individualizada con cada participante, en función de sus necesidades de formación particulares. Facilitó, como consecuencia, fluidez y un buen intercambio. Algo que, en un principio, parecía que podía ser una dificultad propia de lo virtual”.

En primera persona

Pablo Gonzales es técnico electromecánico. Estudió Mantenimiento Industrial en la UTN FRBB y cursó- en la edición 2019 – la capacitación de Montador Mecánico del programa Buen Trabajo. En el 2020 ingresó como empleado en la empresa Daasons (comercializa fertilizantes en distintos lugares del país y en el exterior). Actualmente, se encarga de temas vinculados a la producción: “Manejo las maquinarias a través de un tablero, el polvo (turba) y el proceso de entrada (del fertilizante) y salida (hasta que llega a los silos)”, cuenta el entrevistado. También se ocupa del mantenimiento y control de equipos: cambio de correas de la máquina, revisión mecánica y eléctrica, etc. No son ajenas a sus funciones- tampoco- las tareas de montaje de piezas del molino y partes internas. Al ser consultado sobre el curso de montador mecánico, Gonzales no duda: “Recomiendo hacerlo. Aprendí un montón”. Destaca que los profesores son mecánicos y trabajan de montadores, y dotan a sus estudiantes de los conocimientos útiles para ejercer en cualquier empresa. “Me sirvió mucho para obtener conocimiento de las herramientas y procedimientos que usan las empresas para desmontar y montar equipos, saber cómo es (por ejemplo) el apriete de tornillo e interiorizarme sobre instrumentos de medición”, sintetiza. Dice que los aprendizajes obtenidos le sirvieron durante su ingreso a Daasons. Hoy los sigue utilizando en el desmonte, mantenimiento y montaje de equipos.   Pablo Gonzales finaliza su relato con un deseo: “Ojalá que mis palabras les puedan servir a aquellos jóvenes-o a quienes quieran estudiar, en general- para poder tener un trabajo y lograr lo que yo pude mediante los cursos”.

Más sobre el programa…
  • Capacitaciones del 2021: Optimización Energética Domiciliaria e Industrial e Instalaciones Eléctricas hasta 1000 V y 10 KW (iniciaron ambas en junio), Comercio Electrónico y Generadores de Energía Solar (comienzan las dos en agosto) y Refrigeración y Aire Acondicionado I y Refrigeración y Aire Acondicionado II (a dictarse, el par, en octubre).
  • “Se trabaja en la incorporación de jóvenes al mercado (fomentando y compartiendo las actividades que hacen) y en que las personas adquieran conocimiento; pero Buen Trabajo no es un programa de salida laboral directa”. Pamela Luppo.
  • “Tradicionalmente, los cursos están orientados hacia la actividad práctica y al trabajo de taller. Fue gratificante y una sorpresa muy linda que ex alumnos vuelvan a formarse- ahora en habilidades blandas- en capacitaciones de mayor contenido teórico y de modalidad virtual como lo fue el 2020”. Tamara San Emeterio.